No hay duda de que nos encontramos en la era digital, donde estar conectados a internet y tener presencia en las redes sociales se ha convertido en una prioridad.
La mensajería instantánea como WhatsApp ha pasado a ser el principal medio de comunicación sobretodo entre los más jóvenes, el correo electrónico provee más rapidez a la hora de comunicarse que el correo ordinario, las redes sociales son un canal para relacionarnos e interactuar con gente de todo el mundo, internet y su infinidad de páginas web son la mayor enciclopedia sin lugar a duda donde todo lo encuentras, incluso hoy en día puedes hasta encontrar trabajo y pareja en la red.
Toda nuestra vida depende de una u otra manera de las nuevas tecnologías, pero no somos consientes que también es una forma de exponer nuestra vida privada y no tener control sobre ella.
Hoy en día, las personas dependemos de la tecnología, y es esa misma dependencia que cada vez es mayor, las que nos expone más y hace más difícil esconderse frente a los ciberacosadores.
Debido al alcance, difusión y masificación que permite internet y los dispositivos móviles, es cada vez más común que el agresor haga daño al autoestima y dignidad de la víctima haciendo un mal uso de las nuevas tecnologías.
No olvidemos que la Violencia Digital es toda aquella acción que mediante medios digitales acose, amenace o extorsione a cualquier individuo.
Como cada año, la Asociación Stop Violencia de Género Digital realizó un estudio para analizar la situación actual de la Violencia Digital en España en el año 2017. Este estudio tiene como objetivo analizar la percepción y concienciación de la sociedad española en materia de Violencia Digital.
Se observó que:
- Un 48,94% de las personas se han sentido acosadas en alguna red social.
- Un 42,55% indica que ha dado, cedido o revelado sus contraseñas de sus correos electrónicos o redes sociales a su pareja
- Un 79,4% considera que la desigualdad de género en el ámbito digital provoca violencia
- Un 47,4% indica que desconoce como reaccionar ante este tipo de delitos informáticos
- Un 28,4% afirma que ha recibido insultos o amenazas de su pareja a través de algún medio digital
Todas aquellas personas que están siendo víctimas de violencia digital (Ciberacoso, Ciberbullying, Grooming, Violencia Genero Digital, etc.) se sienten desprotegidos ante una sociedad cuya legislación y normativa es escasa en materia de delitos informáticos, donde existe un vacío en cuanto a la desinformación que a día de hoy sufrimos todos en esta materia.
Es por ello que es imprescindible disponer de profesionales capaces de intervenir en un caso de violencia digital, que sean capaces de detectar el delito, identificando sus canales de actuación para su posterior análisis de evidencias digitales; así como conocer las herramientas de ciberseguridad que ayuden a prevenir, proteger y salvaguardar los dispositivos de la víctima evitando así futuros ataques. No olvidemos que lograr una empatía con la víctima es fundamental para una correcta intervención.
En una defensa de un caso de violencia de género digital o cualquier otro tipo de delitos informático se debe presentar junto a la denuncia una serie de principios operativos en los que el abogado pueda apoyarse a la hora de la defensa ante un juez, este es el objetivo de lo que se conoce como Evidencia Digital.
Una evidencia digital es un contenedor de información digital que podemos utilizar como prueba en un procedimiento judicial. La extracción de información de discos duros, tarjetas de memoria, dispositivos móviles y ordenadores son ejemplos de evidencias digitales que resultan de utilidad para nuestra defensa en un procedimiento judicial.
Hay mucho tabús sobre que se puede hacer o no se puede extraer de una evidencia digital, y es importante conocer realmente lo que se puede extraer para preparar una defensa mas acorde a cada caso de delito digital.
Es imprescindible disponer de la información y ayuda necesaria para detectar cualquier caso de ciberacoso en internet, redes sociales y dispositivos tecnológicos, puesto que la vulneración de nuestros derechos básicos constitucionales y el derecho a la intimidad en las telecomunicaciones es materia tipificada y penada por nuestro actual código penal.
No solo es importante contar con profesionales que sean capaces de realizar correctamente una extracción, manipulación y análisis de las evidencias digitales, sino también que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad conozcan el funcionamiento de estas; el proceso de análisis y extracción; y las formas en las que estas pueden llegar a ser manipuladas para evitar así dar por valida una evidencia sin serlo.
Objetivos
- Dar una visión global sobre la importancia que tiene en un proceso judicial la Evidencia Digital
- Exponer los diferentes tipos de evidencias digitales y sus particularidades
- Dictar las pautas para evaluar la veracidad de una evidencia digital
- Exponer la forma correcta de salvaguardar estas evidencias
- Exponer el rol de la cadena de custodia en la extracción de evidencias digitales
Dirigido a:
- Jueces y Fiscales con el objetivo de tener unas mínimas pautas sobre delitos informáticos, evidencias y violencia digitales, para una correcta actuación en sala judicial sobre el tratamiento de evidencias digitales
Fecha y Duración: 2 de Diciembre de 3 a 6 de la tarde – Hora Venezuela –
Contenido
- Tipos de Violencia Digital
- Valor jurídico de la evidencia digital
- Presentación en sala de evidencias digitales
- Problemática actual de los letrados ante las evidencias digitales
- Evidencias digitales en dispositivos móviles
- Evidencias digitales en redes sociales
- El correo electrónico como prueba judicial
- La cadena de custodia de una evidencia digital
- El Informe pericial de una evidencia en un proceso judicial
50 plazas disponibles
Precio: 50 dólares
Modalidad de Pago: Paypal. Una vez realices la inscripción recibiras un correo electrónico solicitando el pago del importe del taller.
Profesora
María Gavilán Rubio. Jueza en Madrid. Profesora de Derecho Penal y penal internacional en grado y en el master de acceso a la abogacía del real centro universitario maría cristina adscrito a la universidad complutense de madrid. Participa como formadora de jueces y fiscales en materia de trata y tráfico de personas tanto a nivel nacional, en la escuela judicial española como a nivel internacional en países como Bolivia, Ecuador, Guinea Ecuatorial, Reino Unido, Bélgica, entre otros. Profesora de fuerzas y cuerpos de seguridad especializados en trata, en especial los grupos de UCO de guardia civil o cuerpos no especializados como Policía Local. Colaboradora con la agencia UNODC de Naciones Unidas en diversas actividades de lucha contra la trata y tráfico de personas. Participante en el seminario de buenas prácticas procesales en materia de trata y tráfico de personas organizado por la comisión europea. Autora de diversos artículos sobre la materia publicados en revista jurídica especializada. Actualmente finalizando la tesis doctoral sobre la trata de seres humanos con fines de explotación sexual en el departamento de derecho penal de la universidad complutense de madrid.